Tus emociones no son buenas consejeras
2 Timoteo 1: 7
7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
Hoy en día vemos cómo el mundo nos manifiesta de muchas maneras lo «normal» que es que el ser humano se deje controlar o dominar por las emociones, pero cuando nos sumergimos en ellas y experimentamos lo cambiantes que son nos damos cuenta que no es la forma correcta de vivir, pues debido a ellas (cuando no están bajo control) evidenciamos en nuestro día a día un desequilibrio emocional que termina llevándonos a sentir frustración, agotamiento, ansiedad, depresión, etc.
Nuestras emociones fueron puestas por Dios, fuimos creadas con ellas; somos tripartitas, no solo contamos con espíritu y cuerpo, sino también con el alma en donde se albergan nuestros pensamientos, voluntad, y aun las emociones.
Dios nos creó a Su imagen y semejanza (Génesis 1:26a-27), es decir, con la capacidad de pensar, así como Él; con la posibilidad de sentir, al igual que Él; pero también con la opción de decidir, como Él también la tiene . Fue bueno para Él crearnos de esta manera, por eso puedes observar que viendo toda su creación, incluído el hombre y la mujer, concluyó que todo lo que Él había hecho era bueno (Génesis 1:31a)
Las emociones son un “estado de ánimo que se produce por las impresiones, sentidos, ideas o recuerdos, y que con frecuencia se traducen o manifiestan en gestos, actitudes u otras formas de expresión”, entendemos que pueden llegar a ser tan variables por todo lo que puede llegar a afectarlas, que resulta un total fracaso para nuestras vidas el tomar decisiones o guiarnos con base en ellas, porque muchas veces incluso están fuera de control Por eso, Dios nos exhorta a que si hay alguna decisión que debamos tomar, lo hagamos, pero basadas en el cimiento firme de Su palabra y bajo la guía de Su Espíritu Santo y no en nuestro sentimientos o emociones. Que llevemos nuestras emociones y las sometamos al Señor, Él nos ha dado dominio propio (2 Timoteo 1:7) y por eso podemos sujetar nuestras emociones que quieren salirse de control. Recuerda que no debemos amoldarnos a este siglo, sino que nuestra mente sea transformada por la Palabra de Dios (Romanos 12:2).
¿Por qué no debemos dejarnos dominar por nuestras emociones?
¿Cuál es la mejor forma de tomar decisiones?
Dios te bendiga
Puedes escuchar este devocional en nuestro canal de Youtube en este link: https://youtu.be/cXZ4Gja4Nl0
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