Palabras llenas de gracia
Colosenses 4: 6
6 Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
Nuestras palabras y la forma en que las comunicamos son importantes. A los creyentes se les exhorta en Colosenses 4:6, “Sean sus palabras sazonadas con sal”. Como creyentes, nuestras palabras deben reflejar a los demás la verdad del evangelio. Deben revelar cómo este evangelio ha transformado nuestras vidas. Nuestras palabras deben tener un impacto positivo en nuestras conversaciones, ya que aportamos un “sabor” diferente a nuestras interacciones, edificamos a los demás y además compartimos el evangelio.
Pablo les estaba recordando a los colosenses que fueron llamados a ser personas llenas de sabiduría divina. Él quería que sus palabras, y las nuestras, representaran a Jesús. Y para ello, podemos seguir Su modelo para alcanzar gracia y verdad juntamente. Como cristianas debemos saber cómo responder a cada uno”
Las palabras que hablamos reflejan lo que hay en nuestro corazón, “porque de la abundancia del corazón habla la boca” (Lucas 6:45). Nuestras palabras pueden ser sazonadas con sal hablando la verdad en amor (Efesios 4:15) y siendo misericordiosas en toda circunstancia. Como dice Proverbios 16:24: “Panal de miel son los dichos suaves; suavidad al alma y medicina para los huesos“.
Así como la sal tiene propiedades curativas, nuestras palabras deben traer sanidad y bondad, animando a nuestros oyentes y señalándoles a Jesús. Para dar una respuesta sazonada, debemos presentar lo que decimos y cómo lo decimos de una manera que refleje y de gloria a Cristo.
¿Cuándo te es más difícil usar palabras amables y llenas de gracia?
¿De qué manera puedo enriquecer mis palabras para que edifiquen a los demás?
Dios te bendiga
Puedes escuchar este devocional en nuestro canal de Youtube en este link: https://youtu.be/5ZaFG4-nCvM
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