Estudia la Palabra
Colosenses 2:8
Muchas veces pretendemos recibir las enseñanzas de la Biblia con nuestros preconceptos y entenderla con nuestro entendimiento humano, pero debemos tener claridad que la Biblia no es como cualquier otro libro, no podemos interpretarla como nos parezca, no es de interpretación privada (2 Pedro 1: 20). El Espíritu Santo nos da la claridad para poder interpretarla correctamente.
En Colosenses 2: 8, se nos advierte que nadie nos engañe, sino tenemos la claridad necesaria al estudiar la Palabra, podemos ser engañadas fácilmente, podemos caer en doctrinas de error. Todas estas doctrinas equivocadas nacen de una mala interpretación de las Escrituras.
En Hechos 17: 11, tenemos el ejemplo de los creyentes de Berea, ellos eran más nobles que los de Tesalónica, porque escudriñaban las Escrituras, y analizaban las enseñanzas de Pablo y Silas, a la luz de la Palabra. En otras palabras no tragaban entero, como diríamos en lenguaje coloquial. Ellos iban a las Escrituras y miraban si eso era así. Eran personas que amaban y respetaban la Palabra de Dios.
Debemos imitar a los cristianos de Berea, debemos no sólo leer, o escuchar la Palabra de Dios, sino meditarla, escudriñarla, entenderla. Cuando la entendemos nos será más fácil aprenderla y obedecerla. No podemos obedecer algo que no entendemos. Cuando la entendemos será más difícil que nos desviemos de la verdad.
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