Emanuel
Isaías 7: 14
Cuando Isaías profetizó sobre la venida del Mesías utilizó el nombre de Emanuel: “Dios con nosotros”, en Mateo 1:23, el evangelista, hablando del nacimiento de Jesús, menciona Isaías 7: 14 para referirse a su cumplimiento.
Si analizamos este nombre es algo grandioso lo que encierra.
Emanuel quiere decir que Dios mismo descendió del cielo para hacerse semejante al ser humano. Imaginemos un momento al Dios todopoderoso y majestuoso en el cuerpo de un bebé dependiendo de María para todo. Al tomar la forma humana padeció todo lo que un mortal puede sufrir y hasta más. Recordemos que mientras estuvo en un cuerpo humano Jesús, sin dejar de ser Dios, fue hombre ciento por ciento. Es algo para nosotras difícil de comprender, fue perfectamente hombre y perfectamente Dios, aunque muchos nieguen sus dos naturalezas.
En Filipenses 2: 1 – 11 el apóstol Pablo expresa esa encarnación como un acto de humillación de Jesús. Para Dios, era algo humillante hacerse uno de nosotros. Juan lo expresa “y aquel Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros” Juan 1: 14. Jesús vino a mostraros al Padre, aunque su apariencia era como la de cualquier hombre, sigue diciendo Juan 1: 14: “y vimos Su gloria, gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Jesús mostró la gloria de Dios Padre.
El vino a buscar a lo que estaba perdido, a acercarnos nuevamente a Dios por medio de su muerte de cruz. No podemos separar el suceso de su nacimiento con el suceso de redención de su muerte y resurrección. Precisamente El vino como sacrificio. El vino voluntariamente para dar Su vida como expiación por nuestros pecados. Pero si vemos lo que dice Filipenses 2: 11, Dios lo exaltó hasta lo sumo; le dio un nombre que es sobre todo nombre. Esa es su posición de autoridad y poder, por eso debemos exaltar y glorificar siempre Su nombre; sólo El merece toda nuestra adoración.
Comments