top of page
Foto del escritorPrincesas y Guerreras

18 de Noviembre de 2019

Actualizado: 13 jun 2021

Abre mis ojos



Salmo 119: 18


Handel, el prominente músico alemán, compositor de la extraordinaria pieza El Mesias, su obra cumbre, fue perdiendo su visión paulatinamente, hasta quedar completamente ciego. Estando en esa condición dijo algo verdaderamente impactante: “Creo que mi habilidad para ver a Cristo crece a medida que decrece mi capacidad para ver a otros”. Mira que él empezó a ver verdaderamente a Cristo cuando sus ojos físicos no pudieron ver, su mirada se enfocó sólo en el Señor. En realidad Su experiencia puede enseñarnos que lo espiritual se contempla espiritualmente.

La Biblia menciona dos tipos de ceguera: la física y la espiritual; la de los ojos y la del alma. Muchas veces, como los fariseos y los escribas, no alcanzamos a ver a Jesús por nuestra ceguera espiritual. Ellos por su orgullo y su corazón endurecido no pudieron reconocer a Jesús, a pesar de los milagros y prodigios que realizó ante ellos.

El salmista dijo: “Abre mis ojos para ver las maravillas de tu ley”, que podamos decir lo mismo, la Palabra y el Espíritu Santo nos revelan a Cristo. Jesús dijo que las Escrituras dan testimonio de Él. Cuando las Escrituras nos son abiertas podremos ver realmente quien es Jesús, quien es Dios.

Sin la iluminación de parte de Dios, sin remover el velo o la cubierta que hay en nuestros ojos, no podemos mirar lo que deberíamos ver en la Palabra de Dios, ni mucho menos quien es El en realidad.

Dios tiene tanto que no quiere mostrar y revelar de sí mismo, hay que mirar con nuestros ojos abiertos y Él debe abrirlos. Esa revelación viene de Él mismo, no viene por revelación humana, por nosotras mismas no podemos ver lo grande y maravilloso que Él es. Que puedan ser abiertos nuestros ojos espirituales y podamos contemplarle.



8 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Comentários


bottom of page