¿Bella o fea?
1 Pedro 3: 3-4
Todas conocemos el cuento del patito feo, un cisne que se crio como un pato y se creía el más feo de todos, aunque en realidad cuando creció fue el cisne más hermoso. Creo que alguna vez nos hemos sentido como ese patito feo.
¿Qué ves cuando te miras en el espejo? ¿te ves bella o fea? Antes de responder leamos 1º Pedro 3:3-4, aquí encontramos dos niveles de belleza: la belleza externa y la belleza interna.
Con respecto a la belleza exterior debemos entender que es un concepto cultural. Lo que para una cultura es belleza, para otra cultura puede que no lo sea. ¿Son más bellas las rubias de ojos celestes o las morenas de ojos verdes? ¿Y quién estableció que las gorditas no pueden ser lindas? Para muchos la súper delgadez es sinónimo de belleza, para otros es anorexia. Por eso Pedro dice que la belleza real no consiste en lo que usas, ni en tu apariencia externa, sino en cómo eres. ¿Linda o fea? ¿Según quién? ¿Según qué criterio cultural? ¡No importa! Lo realmente importante es que te veas a ti misma hermosa y especial. Cuida tu apariencia, pero no para los demás, sino para ti misma. No para sentirte aceptada, sino para sentirte bien contigo misma.
Con respecto a la belleza interior, no es cultural, es personal, y todos los que te rodean la perciben. ¿Eres bella en tu carácter? De esto habla Pedro cuando dice que la belleza sale de lo íntimo del corazón y es algo que debemos procurar cada día, como cristianas nuestro ornato más que externo es interno. Lo que eres adentro lo mostrarás afuera. (Proverbios 15:13) El corazón gozoso y lleno de paz hermosea el rostro.
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