Orando por la nación
Jeremías 29: 7
La Palabra en Jeremías 29:7 recomienda interceder por la paz de nuestra ciudad y por la de aquella donde nos encontremos porque de eso depende también nuestra tranquilidad. Si estás en una ciudad extraña, ora por ella.
Cuando se ora por una nación hay que tener en cuenta ciertas áreas básicas. Primero las familias que son base fundamental de una sociedad. Cada una de ellas tiene la responsabilidad de educar a los ciudadanos. Nadie, sino la familia formar en valores, costumbres y hábitos. Oremos para que se reduzca la violencia e intolerancia. Ora por tu familia y luego por todas las demás.
Ora por la iglesia. Todos somos parte de ella y debemos dar buen ejemplo. No solamente el pastor, debes ser íntegra.
Oremos por los educadores que contribuyen a formar buenos ciudadanos. Es necesario orar por los centros educativos para que vuelva la disciplina y buenas costumbres, y se enseñen principios y valores cristianos.
Es urgente orar para que los medios de comunicación que sean responsables en llevar la verdad en todo lo que divulguen.
La Economía es otro objetivo de nuestra oración. Debemos orar por la prosperidad de comerciantes, fabricantes y exportadores que generan empleos para que todos estemos bien.
Debemos orar por los gobernantes. Para vivir quieta y reposadamente debemos tener un sistema de gobierno eficiente y confiable. Si queremos ver un cambio en nuestro país es necesario que trabajemos por ello y oremos por todos.
Los problemas de violencia y corrupción son la evidencia de la crisis que se vive en todos los ambientes de la sociedad, no solamente en el gobierno y tenemos que cambiarla con el poder de la Palabra de Dios. Todos somos agentes de cambio, porque formamos parte de la nación. No te sientas espectadora, eres protagonista y como tal debes actuar obrando bajo la voluntad de Dios.
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